El Tajinaste rojo del Teide o Echium wildpretii, por su nombre científico, es una especie arbustiva endémica de la Isla de Tenerife. Esta planta tiene un encanto especial por su curiosa forma de lanza con un intenso color rojo que sólo deja verse durante la primavera.
Precisamente son sus colores vivos lo que producen un impacto visual digno de ser admirado en el interior de El Teide. Que el Tajinaste rojo sólo pueda encontrarse en el Parque Natural de El Teide, es lo que lo hace aún más especial si cabe.
Características del Tajinaste rojo
Esta planta con forma de lanza puede llegar a alcanzar los 3 metros de altura. Se trata en realidad de un arbusto sin ramas que posee una floración muy densa y espectacular de intenso color rojo. Las flores, más espesas en su base, se van haciendo más pequeñas y cortas a lo largo del tallo, lo que le otorga ese parecido con una lanza. Las hojas que produce son de tonalidades plateadas que se van entremezclando con las flores.
Su nombre científico (Echium wildpretti) le fue dado en honor al horticultor Hermann Wildpret, persona muy afamada en la isla de Tenerife por su implicación, como botánico mayor del Jardín Botánico de La Orotava, amplió la diversidad del mismo. Sin embargo, esta no fue su única contribución a la flora de la zona, ya que sus esfuerzos por ampliarla no se limitaron a este jardín, sino que impulsó el desarrollo de otros tantos parques y jardines de la isla.
Este Tajinaste no es el único de la zona, ya que podemos encontrar también el Tajinaste azul, cuya diferencia parece clara atendiendo a su nombre.
Hábitat del Echium wildpretii
El Tajinaste rojo o Tajinaste rojo del Teide es natural de la Isla de Tenerife, de forma más concreta podemos decir que es propio del Parque Natural del Teide. De ahí el nombre común por el que también se le conoce: sangre del Teide. Curiosamente, esta especie pertenece a la familia Boraginaceae que es originaria de la Macaronesia. Al igual que ocurre con el Tomillo borriquero o Cantueso.
Bajo el nombre de la Macaronesia se conocen a los cincos archipiélagos del Atlántico Norte, a saber: Azores, Canarias, Cabo Verde, Madeira y las islas Salvajes. Pues bien, dentro de este territorio podemos encontrarlo en las Cañadas del Teide, La Fortaleza, Valle de Ucanca y cercanías del Parador Nacional. De hecho, es la especie más representativa de las Cañadas, zona considerada como la de mayor interés florístico dentro de la Macaronesia.
Como hemos comentado, en estas zonas convive con otras especies de Tajinaste como el Tajinaste azul o picante (Echium auberianum), menos común que el rojo. También encontramos otras especies como el cabezón del Teide (Pterocephalus lasiospermus), la tonática (Nepeta teydea), la margarita del Teide (Argyranthemum tenerifae), el alhelí del Teide (Cheirantus scoparius), el cardo de plata (Stemmacantha cynaroides) o la hierba conejera (Pterocephalus lasiospermus), entre otros muchos.
La miel de Tajinaste rojo
Sin duda alguna, más allá de la belleza de esta planta que decora el Parque Nacional del Teide, su principal atractivo es su condición de planta melífera. Se conocen como tal aquellas plantas que tienen la capacidad de producir néctar, tan importante para la elaboración de la miel. De hecho, el nombre con el que son conocidas no es aleatorio: esta palabra procede del término en latín: “mellĭfer” que significa “el que produce miel”. Esta palabra está compuesta, a su vez, por “meli” miel y el sufijo “fero” que en latín significa “el que contiene miel”.
Dentro de esta amplia lista de plantas melíferas se encuentra el Tajinaste rojo. En la zona de El Teide es con total seguridad la planta preferida por las abejas para la recolección de néctar.
La miel de tajinaste es producida por las ya conocidas abejas negras canarias. Esta miel monofloral posee un sabor suave y cremoso que evocan un ligero toque primaveral. El color de esta miel va desde el casi transparente al beige claro; aunque cuando cristaliza, a lo que tiene una gran tendencia, se vuelve blanca con notas beige.
La exclusividad de esta miel le ha valido la Denominación de Origen de Mieles de Tenerife, otorgado el 10 de abril de 2012, que se encarga de garantizar la auténtica procedencia del producto. Para su obtención, la miel de Tajinaste debe superar una serie de controles que valoran, entre otras cosas, la conductividad eléctrica. Para superarlo la miel de Tajinaste debe presentar una conductividad situada entre 0,14 y 400m/cm. Esta cualidad nos informa del contenido en sales minerales de la miel.
Curiosidades del Tajinaste rojo del Teide
Esta especie que, a día de hoy, es muy abundante, estuvo al borde la extinción hace algunos años debido en parte al pastoreo. Esta situación llevó al Gobierno canario a prohibir el pastorreo en el Parque Nacional del Teide en el mismo momento de su creación, el 22 de enero de 1954. Precisamente esta era una de las incompatibilidades con el propio objetivo de su creación: proteger la fauna y la flora de la zona.
Esta planta es una auténtica superviviente, capaz de mantenerse con vida en cotas de hasta 2.000 metros de altitud. Pero esto no es lo único que la hace realmente interesante. El Tajinaste rojo necesita dos años para completar su ciclo biológico. Esto significa que sólo florecerá en su segunda primavera. Tras este estallido floral, el Tajinaste rojo muere.
